“Neshama: concierto para una plegaria” es el título del ballet-concierto de cámara que, tras un año de intenso trabajo, estrenarán la bailarina y coreógrafa Montserrath Otegui en conjunto con el pianista y compositor Leopoldo Gaillour.
La obra, que tiene un perfil íntimo, minimalista y emotivo, estrenará el sábado 6 de abril, a las 21, en la sala Astor Piazzolla del Teatro Auditorium.
Los textos de Otegui fueron el disparador de esta obra, que también cuenta con música, coreografía, puesta de luces y vestuario originales. Desde el mismo título (alma en hebreo), la pieza fue diseñada “para tocar corazones, elevar el alma, y conducir un viaje emocional profundo y bello”, describió Gaillour en una charla con LA CAPITAL.
La obra está estructurada en tres movimientos, cada uno basado en un grupo de textos de Otegui, que suman capas de sentido con la música compuesta y ejecutada por Gaillour y las coreografías, también ideadas por Otegui.
“Desde los primeros encuentros fuimos trabajando la idea de hacer hincapié en la sensibilidad, en lo afectivo, más que en el virtuosismo”, definió el músico sobre la obra.
El primer movimiento, el más sutil, meditativo y contenido, habla del inicio de la vida, de la respiración. En el segundo, el aire infunde la vida y en el tercero, representa la búsqueda del alma, del ideal del alma. “Tiene un sentido muy filosófico y muy espiritual”, apuntó el artista.
“Siempre componer con un disparador es más rico. En este caso, no solo me basé en los textos de Montserrath, sino en su figura, en lo que ella significa”, compartió.
Otegui y Gaillour habían tenido una experiencia anterior trabajando en conjunto, que en este caso se profundizó. “Fuimos trabajando nota por nota, movimiento por movimiento y el resultado nos tiene muy contentos. Realmente, ver bailar a Montserrath es hipnótico, tiene una técnica tan sólida, tan trabajada, tan incorporada y a la vez parece que va flotando. Es fabulosa”, definió.
“Todo está creado para hacer un espectáculo absolutamente nuevo y -yo creo- novedoso. Va a ser la oportunidad de presenciar algo distinto”, indicó el músico.
Miembro del Consejo Internacional de la Danza (CID-Unesco en París, Francia),Montserrath Otegui se ha perfeccionado en Buenos Aires, España, Francia, Dinamarca, Suiza, Mónaco, Portugal y Estados Unidos. Junto al Ballet del Atlántico ha realizado numerosas presentaciones como primera bailarina en Capital Federal y la provincia de Buenos Aires. Ha sido galardonada con varias distinciones locales, nacionales e internacionales.
Trabajó junto a Iñaki Urlezaga, Víctor Ullate, Nacho Duato, Fabianne Cherutti, Suki Schorer, María Blanco, Pino Alosa, Ana Catalina Román, Robert Strajner y Julia Estévez, entre otros. También fue primera bailarina en la compañía de Luis Rufo y el Atlantic Southeast Ballet en Charleston.
En el año 2006 fundó su propia compañía profesional y privada de danza y es directora de la Fundación Montserrath Otegui e Instituto de Danza que lleva su nombre, creada con el objetivo de contribuir a la inclusión social de niños, niñas y adolescentes a través del arte.
Cantante, compositor, músico, docente y terapeuta sonoro, Leopoldo Gaillour se formó en el Conservatorio Provincial Luis Gianneo en canto lírico y piano para luego perfeccionarse con diversos maestros del país y el exterior.
Como cantante solista y pianista actuó junto a diversas orquestas sinfónicas y agrupaciones de cámara en destacadas salas de Argentina como el Salón Dorado del Teatro Colón de Buenos Aires.
A su vez, es intérprete de arpa celta, compositor y autor de dos libros orientados a la metodología pianística y productor de su propio sello y material discográfico. También ejerce como terapeuta sonoro e investigador de los efectos del sonido y la vibración en el cuerpo físico y cuerpos sutiles. Es docente de técnica vocal consciente, repertorio y piano.
Fuente: La Capital mdq