“Tiempo real”, un experimento que aúna fotografía, tecnología y performance, invita al público a sumergirse en el interior de una cámara oscura y a observar los resultados
Luego de concluir semanas atrás La sed, la muestra que reunió fotografías de Alberto Goldenstein, Alejandro Kuropatwa, Bruno Dubner y Guillermo Ueno, y mientras quedan unos días más para visitar en su otra sala Materia, la serie de trabajos recientes de Juan Travnik, la Fundación Larivière inaugura su primera exhibición de la temporada 2024 con una propuesta innovadora que seguramente siga atrayendo visitas al espacio que abrió el año pasado en el barrio de La Boca. Bajo el título Tiempo real, la artista argentina Vivian Galban presenta una exploración lúdica y reflexiva de los rudimentos de la fotografía y de sus intersecciones con el público, que tendrá la oportunidad de ser objeto y parte activa de esta suerte de ensayo performático.
Más que una muestra, Tiempo real es una instalación interactiva que transforma el concepto de creación de imágenes al incorporar la participación de los visitantes en el proceso. Galban ha diseñado una cámara oscura a escala humana que descompone visualmente cómo se construyen las imágenes, lo que permite a los espectadores experimentar la creación fotográfica de forma directa. La instalación deja una prueba palpable de la presencia de cada participante y los invita a reflexionar sobre su propia huella. En el transcurso de la exposición las imágenes resultantes, reveladas analógicamente in situ, irán constituyendo en tiempo real la obra y su montaje final.
La muestra-instalación se propone recuperar la idea del tiempo, la gestión de la espera y el manejo de la ansiedad en nuestra actualidad digital, a la vez que insta a la aceptación de un resultado no editable. Este proyecto de Galban ha capturado la atención del público y la crítica en sus presentaciones anteriores en espacios como Rolf Art, BA Photo y Paris Photo. En esta oportunidad llega a Fundación Larivière con la curaduría de Raúl Flores, en asociación con la Bienal de Performance de Buenos Aires, para ofrecer una experiencia inédita destinada en especial a la comunidad del barrio de la Boca, sede de la Fundación.
“Las versiones anteriores de este proyecto estuvieron en el circuito comercial. Nunca había estado en diálogo con ninguna comunidad. A la Fundación le interesó traer esta pieza y ponerla en diálogo con los vecinos de La Boca, así que habrá activaciones programadas con varios referentes del barrio”, le dice Flores a Infobae Cultura. Como refuerzo del compromiso que tiene la Fundación Larivière con su comunidad, los vecinos de la institución tendrán acceso gratuito a la muestra. Tiempo real permitirá registrar varios colores de La Boca a través de la participación de artistas, instituciones, comercios, organizaciones sociales, teatros y murgas del barrio, en lo que se propone como una experiencia colectiva significativa que trasciende las barreras tradicionales del arte.
La cámara oscura es uno de los dispositivos ancestrales de la fotografía: un instrumento óptico que posibilita obtener una proyección plana de una imagen externa sobre la zona interior de su superficie. Los aparatos fotográficos actuales heredaron la palabra “cámara” de estos antiguos instrumentos, una caja cerrada con un pequeño orificio por el que entra una mínima cantidad de luz que proyecta en la pared opuesta la imagen del exterior. Vivian Galban se sirve de este aparato óptico precursor de la fotografía moderna para operar y activar por su cuenta –y con el público– la creación de imágenes a través de una experiencia contemporánea.
“El resultado fotográfico es bastante dudoso, porque la máquina captura imágenes de una manera muy primitiva. Así que la gente no debe pensar que se va a llevar un retrato, pero sí va a poder participar de una experiencia inmersiva ingresando a la cámara fotográfica e involucrándose en el proceso de copia y revelado”, dice el curador de la muestra. En el interior del dispositivo –de cuatro por seis metros– caben hasta treinta personas, donde también habrá cámaras que transmiten lo que va sucediendo dentro en unas pantallas que estarán dispuestas en la sala. La propuesta se enriquece con una colección creciente de imágenes que resultan de la interacción de los visitantes con la instalación, las cuales se irán colgando en las paredes.
La dinámica trazada en Tiempo real pone de manifiesto cómo las técnicas fotográficas, lejos de perder vigencia, se transforman y adquieren nuevas dimensiones en el contexto actual. Galban se aleja de una visión nostálgica o meramente retro de la fotografía analógica para compartir un espacio de reflexión sobre la importancia del acto fotográfico y su capacidad de generar vínculos sociales y materiales.
Durante los días de exhibición, los jueves, viernes y sábados, la artista estará presente en la sala para activar la cámara oscura en vivo. Entre sus exposiciones individuales destacadas se encuentranValle de Yosemite, desde Rocky Ford, 1872, curada por Teresa Riccardi en el Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires (MACBA, 2016) y No sabemos lo que puede hacer un cuerpo, curada por Valeria González en la Galería Rolf Art (2013-2014). Además participó en 2022 de la colectiva Reimaginando la semejanza y el paisaje, curada por Joni Sternbach en Penumbra Foundation de Nueva York (2022). En sus trabajos, Galban despliega un amplio abanico de recursos técnicos para abordar experimentaciones que pasan del plano cuasi pictórico a las técnicas de apropiación de las imágenes, interviniéndolas, diseccionando los soportes y disolviéndolas en placas de vidrio, hasta llegar a la “muestra relacional”.
*Tiempo real de Vivian Galban en Fundación Larivière. Inauguración: Sábado 9 de marzo, 12 h (Fundación Larivière, Sala 2, Caboto 574, La Boca). Entrada libre. Hasta el domingo 24 de marzo, de jueves a domingos de 12 a 19 hs. Jueves, viernes y sábados de 12 a 17 h la artista estará activando la cámara oscura en vivo. Entrada: $1000. (Vecinos del barrio de La Boca: gratis).
Por José Loschi
Fuente: Infobae