La obra basada en el clásico drama de William Shakespeare propone una nueva forma de encarnar los personajes y presenta al teatro como un arte vivo.
El teatro es un arte vivo, en movimiento, que requiere un gran manejo emocional, físico y, sobre todo, un gran poder de interpretación y trasmisión. De todo esto está compuesta Habitación Macbeth, la obra dirigida y protagonizada por Pompeyo Audivert. Inspirado en el clásico drama shakesperiano, el actor deja en claro que cada vez que se sube a un escenario es para hacerlo con total entrega y pasión, acompañado de su descomunal talento. Una fórmula tal que solo puede dar como resultado una obra digna de admirar.
Pompeyo deja entrar a su cuerpo a 7 personajes diferentes que van tejiendo el hilo de la famosa obra, signada por la ambición, la traición y la venganza, pero un guion completamente moderno y cómico sin perder la esencia del clásico. A través de un cuerpo de un actor completamente entregado a la interpretación, los diferentes personajes toman forma y presencia a través de diversas voces, posturas y gesticulaciones.
Su amplia trayectoria como actor, y como un gran estudioso del teatro, hicieron que Audivert pueda subirse al escenario con la seguridad que trasmite a sus espectadores que siguen eligiéndolo cada fin de semana. Durante poco más de una hora, el actor sumerge al público en una experiencia 100% inmersiva, donde el teatro está a flor de piel sin necesidad de grandes escenografías o la presencia de varios actores. Pompeyo es el teatro en carne viva y no teme mostrarlo.
La música en vivo del cello y el trabajo de iluminación son pilares fundamentales para que Habitación Macbeth se consagre como única en su especie. Pero también hay que destacar el juego de metáforas que propone el guion para analizar a la obra original desde otras perspectivas: por un lado, la importancia de la interpretación, por el otro un profundo análisis sobre los puestos de poder y los extremos a los que se puede llegar para alcanzar puestos políticos, y refuerza la idea original de que todo destino está escrito.
Sin dudas, se trata de una obra inolvidable porque presenta al teatro como un juego y como un arte que merece sus horas de estudio. Un plan para disfrutar y repetir varias veces para poder apreciarla en su totalidad, porque es lo que merece.
Funciones viernes y sábados 20 horas en el Teatro Metropolitan (Av. Corrientes 1343). Entradas desde $9500. En cartelera hasta el 9 de marzo del 2024.
Fuente: El Destape
